comenzaban las clases del primer ciclo en la universidad y se veían nuevos rostros jóvenes llenos de entusiasmo por aprender y saber lo que es ser un comunicador, claro entusiastas de conocer nuevas amistades. Y mientras todos estaban en su rollo de conocerse y planear alguna salida al próximo fin de semana a alguna discoteca, yo como siempre callado y con mi actitud parca solo miraba a mis compañeros esperando que alguno de ellos tenga algo en común conmigo, no se tal vez que escuche rock o almenos que le guste la buena música, por ratos perdía la esperanza y pensaba que era mucho pedir, claro olvidaba que nuestro país es multicultural, eso era lo interesante pues apesar de que todos los presentes en el salón C-201 que recién nos conocíamos convergiamos en que nos gustaba divertirnos, hacer chacota, reírnos hasta no poder más y claro lo más importante todos coincidíamos en que los de la facultad de ingeniería son unos aburridos de miércoles, bueno hay una que otra excepción.
pasaban los días y fui conociendo compañeros que coincidían en algunos gustos musicales y uno que otro comportamiento espontáneo que es parte del perfil de comunicador, transcurrían los dias y ya se había formado un pequeño grupito de nueve locos, nueve locos que al principio ni se hablaban el uno al otro pero fue así como comenzó la historia de "los que la viven", como olvidar cada momento compartido y vivido con la gentita, recuerdo que hacíamos una chanchita para comprar un plato grande de salchipapa y picar entre todos. Como olvidar cuando salíamos temprano de la clase del profe Herreros y nos íbamos al patio a contar anecdotas vividas y lugar tocar guitarra y hacer cada ocurrencia, como olvidar cuando los nueve nos sentábamos en medio del patio de la universidad y armábamos un circulo y habláramos de todo tema.
Risas y más risas en el salón recuerdo cuando en clase de teoría de comunicación el profesor dejaba los temas para las exposiciones y a un grupo de chicas les encargo investigar sobre el diablo y las leyendas urbanas en ese instante algo poseía y se me dio por gritar como un loco saber la lengua y hacer con las manos los gestos de un rockero segundos después los compañeros se empezaron a reír y el profesor se sorprendió y me dijo qué le pasa a este chico? parece que esta poseído por el diablo, las risas de mis compañeros seguían y fue ahí que me pusieron de apodo "El Diablo" pasaban los dias y se acercaba el aniversario de la facultad, una bonita fiesta donde muchos de nuestros hermanos de diferentes ciclos asistieron, comidas, bebidas, competencias entre nosotros y contra los profesores una tarde amena y muy divertida, llegaba la noche algunos de nuestros hermanos en la discoteca bailando y los otros sentados en el gras frente al escenario esperando ver a las agrupaciones. "La Sarita" un grupo de rock que tenía el poder hacer que un mar de jovenes seamos presos del poder de la música, la gala que hacían al poner un danzante de tijeras, pero no todo seria diversión nunca falta uno que otro des adaptado que malogra la fiesta, pues a un parbulo se le ocurrió lanzar una botella de cerveza al danzante de tijera y fue así como se suspendió el concierto y muchos empezamos a pifiar protestando y aclamando por que "La Sarita" no se vaya, pero en vano fue ya nada podíamos hacer y con justa razón una ofensa de tal magnitud no se perdona.
Pero bueno almenos se salvo la noche con una orquesta de salsa muchos bailamos y nos divertimos hasta las ultimas, un bonito recuerdo del primer ciclo.... ahora con nuevos amigos, amigos que este ciclo no veré y amigos que seguiré conociendo. Chicos extraño esos viejos tiempos... los extraño mucho ojala algún día nos podamos reunir... jamás los olvidaré espero que ustedes tampoco.
lunes, 16 de agosto de 2010
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Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarsiempre 9 :) desde 1er ciclo!
ResponderEliminaroee men kee tiempos he!! lloro pee!!... ahahahaha... =)
ResponderEliminaresas epocas pe.. los extraño .. :(
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